Peonías, peonías, peonías!
Cada primavera, muchos esperamos con entusiasmo el regreso de una de las flores más delicadas y encantadoras de la temporada: la peonía. En Argentina, su época de floración comienza en octubre y se extiende hasta diciembre, en perfecta sintonía con la primavera cálida y el ambiente festivo del país. Durante estos meses, las peonías embellecen los mercados de flores de Buenos Aires, adornando las vidrieras y convirtiéndose en el centro de los ramos envueltos con cariño para regalar.
Con su larga historia y rico simbolismo, esta flor ha ganado un lugar especial tanto en la cultura como en la floristería. En la Antigua Grecia, se asociaba con la sanación y la protección: según la leyenda, los dioses eran tratados con raíces de peonía, y la flor misma era considerada un regalo divino. En China, la peonía simboliza la riqueza, el honor y la belleza femenina, y suele aparecer representada en pergaminos imperiales y porcelana. En Japón, representa la nobleza y la fuerza interior, y aparece con frecuencia en grabados como símbolo de dignidad y armonía.
Las variedades modernas de peonías - como Sarah Bernhardt, Coral Charm y Duchesse de Nemours - se destacan por su amplia gama de colores, formas y fragancias.
Provienen de la peonía herbácea china, Paeonia lactiflora, que se convirtió en la base de la hibridación moderna. Estas flores se utilizan ampliamente en la floristería, especialmente en ramos de novia, arreglos para eventos y colecciones de primavera.
En Argentina, fincas ubicadas en Mendoza, Río Negro y Neuquén cultivan peonías en climas montañosos frescos, lo que permite obtener capullos densos y colores intensos y vibrantes.
Las peonías cortadas suelen durar entre 5 y 7 días, y con los cuidados adecuados, hasta 10. Para mantenerlas frescas en el florero, basta con recortar los tallos, cambiar el agua con regularidad y colocar el ramo en un lugar fresco, lejos de la luz solar directa.
Las peonías siguen siendo unas de las flores más queridas de la temporada: combinan suavidad y fuerza, tradición y modernidad, haciendo que cada ramo sea verdaderamente especial.